En el blog de hoy pretendemos
ayudaros a seleccionar y diferenciar los diferentes productos del mercado los
cuales de últimas tendencias no son de madera.
Los suelos de madera están regidos por la norma UNE (acrónimo de Una Norma Española), que obligatoriamente
debe aparecer en la etiqueta del producto.
Para ayudaros a entender los distintos tipos de
pavimentos de madera os los exponemos a continuación:
Suelos de Parquet :
Este tipo de suelos es el más común en las
edificaciones antiguas, hoy día generalmente es sustituido por los suelos
laminados debido al ahorro en el costo de material, mano de obra y tiempo de
instalación. La instalación es mediante cola o pegamento directamente al suelo
de la vivienda, las tablillas mayoritariamente son de pino o roble con unos
espesores que oscilan entre 8 y 14mm., cabe la posibilidad que durante la
instalación aplicar tinte a la madera para obtener la tonalidad deseada y la
terminación puede ser de tres tipos: aceitado, con barniz de urea o con barniz
de poliuretano, con acabados en mate, satinado o brillo. Según la elección del
acabado tendrá un mantenimiento diferente. Os recomendamos consultar a un técnico
de Ametrica & Interior para ayudaros en la mejor solución a vuestra
vivienda.
Denominado así por la colocación de las tablillas,
formado por piezas macizas de una longitud entre 11,5 a 16,5cm de largo, 3,5mm
de ancho, dichas tablillas se pueden
agrupar en mosaicos o dameros, y éstos en paneles mediante mallas en una
de sus caras.
El parquet de espiga formada por tablillas rectangulares
más grandes de dimensiones aproximadas de
12 a 96cm de largo, 9 a 14 mm de grosor.
El parquet industrial es denominado de esa forma ya
que su utilización se remonta a que antiguamente se instalaba en naves industriales,
estas piezas se encuentran colocadas adosadas por su cara y pegadas a la base por
uno de sus cantos, formando losetas, habitualmente son de madera tropical por
su dureza al tránsito denso, es un producto más caro que el parquet anterior y generalmente
su terminación es con aceite.
Suelos de Tarima Machihembrado Macizo:
Este tipo de suelos se
denominan así por la colocación y forma de los tablones, fabricado
con tablas macizas machihembradas en todo su perímetro. Su instalación
puede ser flotante o clavada mediante rastreles. Al igual que al suelo laminado
se debe incluir en la instalación una manta aislante de polietileno expandido u
otro tipo de manta que ayude a reducir la perdida de calor hacia el forjado.
Suelos de Tarima Machihembrado Multicapa:
Denominado así al pavimento formado por una capa
superior de madera, pegada a una o varias capas contrachapado o aglomerado,
y completamente terminado con barniz de fábrica al agua o poliuretano y listo
para su colocación. Con lo cual nos saltamos el paso de lijado y barnizado. Este suelo tiene la
desventaja que solo se puede acuchillar una o dos veces máximo en su vida.
Pavimentos Laminados:
Estos suelos no debemos confundirlos con los
anteriores, ya que básicamente no están fabricados en madera si no con resinas aminoplásticas termoestables aunque su
acabado final se parezca a la madera.
Están fabricados mediante una base compuesta por un
tablero de fibras de DM o MDF, una capa final decorativa en melamina imitando
el dibujo y la textura de la madera y una película transparente que protege el
conjunto. Este tipo de pavimentos no admiten ser acuchillados como los de
madera.
La instalación es flotante con una manta aislante de polietileno
expandido o similar y la unión entre piezas es machihembrada mediante "Click".
Existen
diferentes tipos de resistencia y calidad, dependiendo del uso y transito al
que va destinado:
AC3: Uso para viviendas.
AC4: Uso en viviendas y en locales comerciales.
AC5: Uso principalmente en locales comerciales de tráfico
denso.
Ventajas: