CHIMENEAS DECORATIVAS

Hoy en día cualquiera puede disfrutar del confort que proporciona una chimenea en casa, sin importar que vivas en un piso, que no dispongas de salida de humos, ni tengas opción de hacer una chimenea tradicional. Existen varias alternativas, todas ellas decorativas y denominadas como 'urbanas' o 'sin humos', sin necesidad de hacer ningún tipo obras, sin humos, requiriendo poco espacio y alguna con una potencia calorífica limitada. Todas ellas aportan la visión de la llama simulada creando un ambiente acogedor y despareciendo las cenizas, la leña o la limpieza y mantenimiento que todo esto conlleva.

 

Las versiones que vamos a explicar funcionan con combustibles limpios como el bio-etanol, vapor de agua o electricidad.

CHIMENEAS ELECTRICAS

 

Estos modelos son realmente plasma de fuego simulado con tecnología LED regulables en intensidad. Estas chimeneas no necesitan preinstalación, basta enchufarlas a la corriente eléctrica y colgarlas directamente a la pared,  insertarlas en un hueco o una chimenea existente. En el mercado existen modelos tanto para interior como para exterior,  la mayoría simulan imágenes de fuego dentro de un marco metálico, pero también pueden erigirse en pequeños elementos calefactores para caldear pequeñas estancias similares a estufas  que podemos encontrar en cualquier terraza de nuestra ciudad, pudiendo cubrir una estancia de unos 15m².

CHIMENEAS ELECTRICAS A VAPOR

Este modelo de última tendencia, no produce calor ninguno. Se trata de un humificador eléctrico dentro de un casete  el cual porta una serie de bombillas de color naranja junto con un depósito de agua, finalmente lleva una tapa de troncos simulados. Este tipo de chimeneas no solo son totalmente ecológicas sino económicas ya que pueden funcionar con agua corriente si ésta no es muy calcárea. Aportan humedad al ambiente siendo beneficioso para la salud. El efecto de la llama es impresionantemente realista.

CHIMENEAS DE BIOETANOL

Ideadas como muebles de decoración de gran diseño, están compuestas principalmente por el quemador, una bandeja de acero inoxidable perfectamente sellada en el cual se aloja el etanol desnaturalizado para su combustión, una energía renovable y considerada limpia porque no produce residuos, chispas ni olores (tan solo vapor de agua y dióxido de carbono) y una fuente de calor (3,5 kw/hora).

El producto se puede conseguir en botellas de varios tamaños, todas ellas con tapón de seguridad para niños. La ubicación de estas chimeneas es adaptable en cualquier punto de la casa aportando la esencia de una chimenea real con un toque modernista pudiendo incluso desplazarse de habitación o estancia según la época del año (del salón al jardín, en verano, y del patio al dormitorio, en invierno).

El etanol proviene de la fermentación de los azúcares de algunos cultivos vegetales como la caña de azúcar, la remolacha o el maíz. Como todo el calor producido permanece en la estancia, porque no hay tiro ni conductos al exterior, las chimeneas de bioetanol tienen un alto rendimiento calorífico. Un modelo estándar puede calentar un espacio de unos 35 metros cuadrados.